Un matrimonio centrado en la adoración
La clave del matrimonio no está simplemente en el compromiso o la comunicación, sino en algo mucho más profundo: la adoración. Al reconocer que somos imperfectos como esposos, encontramos el verdadero fundamento en el amor de Dios. Este amor nos llama a amar a nuestras esposas de la misma manera que Cristo ama a Su iglesia: con entrega, paciencia, y un corazón lleno de devoción.
El llamado a estudiar juntos
El crecimiento espiritual no solo es individual; es también una invitación a fortalecerse como pareja. Al dedicarnos juntos al estudio de Cristo, comenzamos a ver la relación matrimonial desde una perspectiva divina, no meramente humana. El Dr. D. Martyn Lloyd-Jones lo expresa claramente: «Debemos iniciar estudiando la relación de Cristo con la iglesia, y entonces, solo entonces, podemos mirar la relación entre el esposo y su esposa.» Este enfoque nos permite descubrir cómo el sacrificio y la entrega de Cristo por Su iglesia transforman nuestra propia visión del amor conyugal.
Construye tu matrimonio sobre un fundamento sólido
Cuando la adoración se convierte en el centro de tu matrimonio, las dificultades y desafíos no desaparecen por completo, pero se ven bajo una nueva luz. La adoración te lleva a valorar la relación como un reflejo del amor eterno de Dios hacia Su pueblo. Este fundamento sólido permite que el vínculo matrimonial no solo sobreviva, sino que prospere en medio de cualquier circunstancia.
Entregarte al estudio de Cristo junto a tu pareja es más que una práctica, es una transformación. Haz que la adoración sea la base de tu relación y siente cómo esta decisión, llena de propósito espiritual, cambia tu vida matrimonial.
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